"Queremos que hable la locura,
pero también los miedos asociados a ella"
Lic.Alfredo Olivera,
ideólogo y fundador de Radio La Colifata.
Son casi cincuenta más veinte o treinta invitados, se reúnen todos los sábados bajo un árbol del patio del neuropsiquiátrico de Buenos Aires donde viven, y jugando a la radio, la hacen realidad. Comandados desde la consola de transmisión por el ideólogo y psiquiatra Alfredo Olivera, sentados en sus sillas al aire libre o caminando alrededor, esperan ansiosos la puntual voz del compañero que a las tres de la tarde saluda: "Buenas tardes, aquí transmite LT 22 Radio La Colifata, directamente desde el Hospital Borda".
La Colifata, en lunfardo (jerga porteña) significa "La loca".
A Alfredo Olivera nunca se le hubiera ocurrido que aquella tarde de 1991 en que lo invitaron al programa de radio para contar su experiencia en el Hospital Borda, el más grande de los Neuropsiquiátricos de Buenos Aires, fuera el comienzo de un proyecto que hoy lleva casi quince años, ecos y premios en todo el mundo y una serie de éxitos médicos hasta ahora no conocidos.
Ese día Alfredo decidió que no fuera él quien contara la experiencia en el Borda, sino los propios pacientes. Ese gesto, ese darle la palabra a quien hasta ahora no la tenía, tuvo una repercusión inmediata y muy favorable. Fue el comienzo de la idea de la Colifata.
Hoy por hoy, Olivera que montó la radio a los veinticuatro años, escribe y resume con claridad los objetivos de su empresa:
"Pensamos la radio como dispositivo terapéutico en dos sentidos: uno específicamente clínico y otro más amplio en sentido comunitario. Lo interesante es que ambos campos (mediante la metodología creada) se enlazan y se producen mutuamente. La radio es el vehículo de articulación de los mismos y lo que circula es la palabra produciendo efectos terapéuticos en los pacientes y des-estigmatizantes en la comunidad. En un campo abordamos el problema de la Psicosis y en el otro el del estigma que habilita conductas de discriminación".
Hugo le hace una reportaje a Nerón, supuestamente en Roma, y ante cada silencio del encuestado, el periodista responde "ah, bueno, perfecto". Ever, el cronista boliviano que lleva veinte años en el hospital, tiene su móvil desde el cielo, que resulta ni más ni menos que el techo del edificio, y le sirve de hangar donde jura estár construyendo su helicóptero para viajar a Bolivia. Daniel López fue acreditado en la cancha de Boca Juniors -esto es real- y allí graba sus crónicas deportivas, en las que muchas veces sólo se detiene en la descripción de las hinchadas, obviando el partido.
En la Colifata cada participante tiene un espacio para hacer de él lo que le guste, lo que le interese, lo que en definitiva le haga bien. Hay poetas, músicos, actores de extraordinarios radioteatros, cronistas deportivos, opinadores, presentadores, etc. La experiencia de la radio optimiza el acto de la convivencia y la libre expresión. Todos los participantes declaran en diferentes circunstancias los deseos de que llegue el sábado y puedan volver a "hablar por la radio".
La radio transmite en directo desde los jardines del Hospital Borda de Buenos Aires, durante cuatro horas con su antena propia. Se puede escuchar sólo en el barrio de Barracas, donde está enclavado el edificio, y participan entre 30 y 50 pacientes (dispositivo abierto), más entre 10 y 20 visitantes, entre los que siempre se encuentran periodistas y psiquiatras del mundo que visitan especialmente la ciudad para conocer la experiencia. La emisión es grabada y luego se realiza un trabajo de edición "bajo criterios éticos- terapéuticos y estéticos", para encuadrarlos en formatos de microprogramas de una duración media de 3 minutos. Estos microprogramas son distribuidos en unas 30 radios de Argentina y países limítrofes, donde se retransmiten. De esta manera, dice Alfredo Olivera "la palabra de los internos (llega) al seno mismo de la comunidad (...) dándole la posibilidad a ésta, no sólo de escuchar y reflexionar sino que además permite abrir un canal para su participación mediante mensajes, preguntas, propuestas, etc.". Los mensajes de los oyentes son oídos por los internos el siguiente sábado, con lo cual el diálogo se plasma.
Además de Radio, La Colifata (ONG, cuyo nombre jurídico es "Salud mental y comunicación"), también realiza una vez por año una "radio abierta", con objetivos "des-estigamatizantes" y "Colifata Solidaria", donde la radio se propone una causa social, un objetivo (recaudan dinero para la compra de alimentos de zonas carenciadas, para la construcción de una escuela, etc.) y lo cumple con el apoyo social. También una vez por año se realiza "La Colifata TV", siempre con repercusiones exitosas.
Además cuentan con una página web: www.lacolifata.org
En el año 2006 prometen que se estrenará un largometraje sobre la radio, con la dirección del argentino Carlos Larrondo y música de Manu Chao, quien ya grabó especialmente una canción como cortina musical de la ceremonia de los sábados.
Colifata es un proyecto pionero en el mundo, inspirador de muchísimas experiencias internacionales, (Alemania, España, Italia, Francia, México, entre otras) y reflejado por los más importantes medios de comunicación como New York Times, BBC, CNN, Le Monde ó El País.
A través de la radio les llegan 3.500 mensajes anuales, de 7 millones de potenciales oyentes. Tienen 3 millones de televidentes a través de sus programas de TV anuales.
La terapia ideada en Buenos Aires consigue para los participantes una externación del índice del 35% y un número menor al 5% de re intenternados. 800 pacientes utilizan los micrófonos de La Colifata al menos una vez al año.
Alfredo Olivera y su equipo de ocho personas integrados por psicólogos, trabajadores sociales, musicoterapeutas y periodistas; trabajan ad honorem.