Mario Wong

Odradek (*)

 

 

Por Mario Wong

Escritor peruano

 

 

 

Resuenan en el caleidoscopio, como un eco, las voces de todo lo que él fue y a eso llama su paciencia. La paciencia en Gerona antes de la Tercera Guerra.

Un otoño benigno. Apenas queda olor de ella en el cuarto…

 

Roberto Bolaño, “Prosa del otoño en Gerona”, in: Tres (2000).

 

 

 

 


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29 de noviembre del 2020


 

…En una de las tantas “repeticiones”  (ensayos) -a las que asistí como « invitado de piedra » (en realidad, ya parecía un miembro más de Odradek  y, yo…, eso de grupos poéticos, manifiestos, avant-garde de poètes…; eso esta bien para Mateo “Quijano”, quijadas tiene el gran puta; y  “genio y figura, hasta la sepultura…”, “Caña brava” le dicen, un borrachín y “fumón mariguano” bravo que se las trae; en las antípodas del barón de Cañabrava, “alter ego” de MVLl, en su novela La guerra del fin del Mundo…; el “último perro romántico” (R.B.), el “Moro maldito”…; lo escuché hablar de “guerrilla potinque”, no sé…; y “¡me vale verga!”, como dice mi amigo, guatemalteco, “Kavahuil” )-, leí “Los Apañadores de la Poka-Elipsis”, texto de mi último libro de poesía; Alonso Santis, fundador del grupo, leyó esa vez, estos fragmentos, que cito seguido, de uno de los relatos de Frank Kafka :

«… Existe una criatura que tiene el nombre de Odradek. Ella se parece a una bobina de hilo de coser, plana, tiene la forma de una estrella y, de hecho, ella parece provista de hilo; no se trataría, sin embargo, que de viejos restos de hilos, de naturaleza y de colores diversos, anudados de término a término y, por lo mismo, entremezclados. Pero, no es solo una bobina, no, pues del centro de la estrella sale un palillo transversal, al cual otro se le adapta perpendicularmente. Gracias a este segundo palillo, de un lado, y a una de las puntas de la estrella, por otro lado, el conjunto puede mantenerse de pie, como si fuesen sus piernas.

«Estaríamos tentados a creer, que esta creación habría tenido alguna forma utilitaria, y que actualmente se encuentra dislocada. Pero, no parece que esto ocurra; no notamos ningún indicio en ese sentido; ninguna huella de un esbozo, o de un punto de ruptura que señalaría algo por el estilo; «nada observándolo un poco más de cerca, pues Odradek tiene una movilidad extraordinaria y es, propiamente, incogible.» (1)

Mateo, al final se puso, como siempre…, a joder a Manongo Rojas Morey, un músico peruano, y…; éste solo dijo, preguntó: «…Es cierto Mateo, lo miró sonriente, ¿qué en Maracaibo, hay muchas “maracaibas”? »; agregó, seguido que…, «en Piura, hay una playa que se llama Mateo Salado y…, ¡ya no jodas Mat Sal!» . Me acuerdo, ahora, que Mateo había estado en Piura, una ciudad del norte del Perú, fue allá (no sé en qué años que…), tomó ese menjunje “dégueulasse” (vomitivo y alucinatorio), que proviene de la cocción, durante varias horas, de la médula viscosa del cactus de los Siete Vientos y… ; hay cerámicas, huacos, de las culturas pre-incas, Vícus, Mochica-Chimú…, Chavín…, que representan personajes, chamanes, tomando el brebaje…; testimonian las tomas de las pócimas del cactus en ritos sagrados, sacrificiales, donde los chamanes son representados teniendo entre las manos un báculo o una serpiente, lo que es un símbolo de poder y de autoridad (que tenían en sus respectivas comunidades étnicas); o se les representaba, también, con un “bastón de poder” (que les había otorgado sus experiencias chamánicas, con el brebaje de cactáceas). Aún, en tiempos más actuales, yo he asistido a la toma del brebaje, por gente que conocía (desde que era adolescente) en el Distrito de Castilla, en el departamento de Piura, en la costa norte del Perú; también, creo, los chamanes bolivianos y mexicas (Aztecas, Mayas, Nahuales…) lo tomaban; de ahí las pirámides…, los sacrificios…Todo esto, ligado con las cosmologías y las formas de vida de cada pueblo, en sus expresiones duales; la hibridez cultural, el sincretismo están muy presentes en estas culturas. Sin ninguna duda, Mateo habría tenido un cierto acercamiento con esas prácticas mágicas, “neo-chamánicas”, que no desligan la vida de la muerte, ni la luz de la oscuridad: Existe el dios Sol, protector, y la diosa Luna, que es la patrona del embarazo, creadora del arte de tejer y diosa de las aguas, corrientes torrentosas e inundaciones.


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21 de octubre 2020

 

…Algunas veces estuve, por la noche -les dije-, en el cuchitril de Mateo («l’Installation d’Art» se hallaba aún allí; varias obras plásticas que él había realizado durante el confinamiento “Covide-19”, phase II; casi en las semanas últimas), tomando y fumando hasch, y él me releyó alguno de sus textos de El Maelstrom, su único libro de poesía, mientras sonaba la música de los Rollings, Bowie, Burdon, The Cure, Charlie García, Los Prisioneros… (toda la “décadanse” de los 80s); Césareo Saulus asistía y leyó, también, alguno de sus poemas; me acuerdo que una de esas noches recitó, lo sabía de memoria, “Margarita está linda la mar”, de Rubén Darío (tiene muy buena memoria…; y sus “disco duro”, registra todo lo que lee, escucha y…; leyó, utilizando su portable, “Gambito del Rey” y “Imitación de Propercio” del poeta peruano Rodolfo Hinostroza, autor de Consejero del lobo y…; también leía , in english, con muy buena dicción a TS Eliot y a Ezra Pound, sus poetas preferidos, junto con Rodrigo Lira, Lynch & Parra, el de los “anti poemas”); bebíamos y fumábamos hasch y hierba, “marijuana”, de “Los campos verdes” de Los Wilkox colombianos, hasta que… , putain!; Alonso Santis y Manongo Rojas, el músico peruano, participaron, ocasionalmente, en esas tertulias en que…; todo transcurría calmamente hasta que…, la merde! Ocurría casi siempre, en algún momento…, ¡pura “ralladura”!..., de extrema dura (en tiempos de Covide o “post Covide-19”), Mateo, el “Moro maldito” (asi había firmado algunos sus textos poéticos, el Mateito H.) que..., il cassait l’ambiance!, él, siempre, cagándola; que… agredía verbalmente a Césareo Saulus, a Manongo Rojas o a algún otro de los  (invitados de Odradek) que asistían…Déjenme que les cuente (“Déjame que te cuente, limeña/ Jardines en…/ Airosa caminaba la…”) …, Odradek…, Manogo, Césareo Saulus…, Mateo Sel…, su karma…, el “Moro malpa…”, el muy malparidito que…, el «último poète maudit» ..., Putain de… ¡La “maldición” te perseguirá!

 

*

…Fue Alonso Santis, poeta y músico, argentino, de quien partió la idea de crear Odradek (grupo poético underground, que tuvo muy corta vida; dos meses y medio o a lo más tres; hubo una presentación, en público, en el “Pinchos”, un bar en la avenue de Paris, en Montreuil).

 

Los ensayos se realizaban una vez por semana, los jueves por la tarde, en una cave, de La Vache bleue, una asociación cultural, debajo de una vía férrea abandonada, en el Canal de l’Ourq, casi frente al bassin de La Villette. Participaron Alonso Santis, tocando la batería y recitando; junto a otro músico peruano, saxofonista tenor (y también tocaba diversos instrumentos, de la música andina, zampoñas, antaras, quenas…) y dos poetas chilenos Mateo Hinojosa de La Mancha y Césareo Saulus, de estilos poéticos diferentes ambos; Césareo Saulus tiende al hermetismo, ¿“huidobriano”?, mientras que la poesía del primero es más coloquial y estridente y…; tu la fermes, Serge Personne! Y uno de los invitados (hubo otros) fui yo, que acababa de publicar, hacía pocas semanas, el libro de poesía Los demonios Uchuraccos (Lima-Perú, Eds. Del bolsillo ajeno, mayo del 2022). A mí, hasta ahora, estos ensayos, “répetitions” (que se difunden, en buena parte, en la net, pues…), me resultan más importantes que la presentación que tuvo Odradek en “El Pinchos bar”; de repente, creo, era porque el alcohol y la droga que consumíamos, en la cave de La Vache bleue, nos desinhibía y la música y la lectura, de todos los que participaron, aparecía mucho más “espontáneamente” creativa, en cada instante o en ese maintenant de la invención, como si se tratase de un “hipertexto”, colectivo, que se recrease en cada…

 


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17 de septiembre del 2020


 

…Todo ocurría en esos tiempos de confinamiento (o « post-confinement », a causa del « Covide-19 ») en que Odradek se deshizo… , yo no estuve presente esa noche (yo era el « convidado, invitado, de piedra »… ; Alonso Santis me llamó, por la mañana, para contarme lo que había ocurrido, en lo que sería la última repetición del grupo y… Yo, luego, les cuento que …, la guerra, aún no…, irrumpiría como…, y… ; Mateo, el «Chamán del Cactus de …. », me dijo…, putain !Terrorisme-DAESH, « Covide-19 »,…, guerre maintenant… Son tiempos de desastre y… ; ya les gilets jaunes…, el Capitolio-USA…, las hordas bárbar….

 

Aquí, Mateo… ; et moi, je la ferme !; y… «Las hordas bárbaras que… -una profecía del « neo-chamán », en una ciudad como París, que se hallaba en pleno “Covide-19”-, … fuerzas oscuras actúan, en la sombra, en detrimento de la vida misma (cuando parecía que toda capacidad de resistencia había perdido sentido y….), y la destrucción de la ciudad se “proyecta” en un “futuro” que se actualiza maintenant…, como si de una novela de science fiction -Flowers for Armagedon–Paint it black- se tratase.

 

*

 

Milthon, artista colombiano, obtuvo el premio de escultura, por su obra “El soldado desconocido, poilu, y su fiel perro Céline”, durante la “Gran Guerra” (1914-18)”; esta escultura “simboliza la poderosa unión del soldado y su perro”, leo en…, y… Leia y releía, esos días, Une soupe aux herbes sauvages (2), libro autobiográfico de Emilie Carles y mirando en un momento, en la net, la foto de la escultura del artista, con una nota sobre su obra premiada…; cito:

Apretándose el uno contra el otro, ante la adversidad “environnante”, próxima

de lo imprevisible, el perro y el hombre la enfrentan y no deben fallar.

Ellos se atrincheran ahí, esperando oponerse al destino con un solo pensamiento, en una actitud única, bajo la peregrina que les sirve de refugio (Milthon).

…Como por azar, las páginas sobre Céline el escritor, del libro de la Carles, me llevaron a escribir:

… El soldado desconocido de Milthon vive -en esta etapa de la historia trágica, que se repite, de Europa-, con su fiel can “Céline”, en un Voyage au bout de la nuit (los esposos Carles, Jean, ya fallecido y Emilie, pacifistas ejemplares y anarquistas, se reencontraban leyendo ese chef d’oeuvre del novelista francés); el soldado y su perro étaient pris, en una trinchera, en esa fuga en masa hacia  la muerte, yendo juntos hacia el gran fuego…, hacia esa pira sacrificial; ocurría en el presente…, et ça venait des profondeurs, et c’était arrivé (Céline). El y el fiel perro, en un acto de heroicidad extraordinaria se encuentran bajo el intenso fuego del enemigo, dos soldados alemanes (otros dos brothers in arms…; dos puntos negros, igualmente desconocidos y…) que les disparan desde hace ya más de un cuarto de hora…; él no tiene más de veinte años y bajo el fuego del enemigo sienten (animal y soldado) toda la locura y la absurdidad de la guerra:

…tout cela m’apparaissait soudain comme l’effet d’un formidable erreur. Dans une histoire pareille y’a rien à faire…, il n’y a qu’à foutre le camp que je me disais après tout… Au-dessus de nos têtes, à deux millimètres, à un millimètre, peut-être, des tempes venaient vibrer l’une derrière l’autre, ces longs fils tentants que tracent les balles qui veulent nous tuer dans l’air chaude d’été Le vent s’était levé brutal de chaque côté du talus, les peupliers mêlaient leurs rafales de feuilles aux petits bruits secs qui venaient de là-bas vers nous (Céline).

 

(Serge Personne, Revue L’Escargot à galop, París, Octubre 2017

 

 

…Le leí el texto a Mateo-“Saltapatras” y…, al final dijo…, “et que la France se retire maintenant de la OTAN…, no piensas tú, Serge P.”; esas ya son opiniones políticas, “Mateo Sel” (se había quemado el pie izquierdo, con aceite de cocina, le cayó el sartén caliente a “Mateo Salado”, y… y también le dio lumbago y no vino al recital de Odradek, en “El Pinchos”, un bistrôt en Montreuil, 150, Av. de Paris ; los del grupo lo llamaban, desde esa vez, “Mateo-Lumbago”, fue por poco tiempo y…, nadie se lo había creído eso del lumbago y, putain!…, siempre, le ocurrían cosas así y nos decíamos que era cosa de…; el karma, los astros…,

¿la estrella negra del animal (J.A.V.),?, me dije…); agregué yo..., ¡joder, con

éste…, “Mateo-Lumbago”!

 

 

 

(*) Framentos de El Chamán del Cactus de los Siete Vientos (novela inédita).

 

  

Paris-Montmartre, 7 de enero del 2023.

 

Notas:

 

(1)  F. Kafka, “Ce qui tracasse le père de famille”; In : A la colonie disciplinaire et autres récits, Babel, 1988, pp. 92-93; la traducción es de Santis.

(2) Paris, Eds. Jean-Claude Simoën, 1977. Emilie estuvo casada con el obrero anarquista y pacifista Jean Carles, ésta es una historia de Francia (y no sólo de ella) que desde el “mirador” de un pueblo, Val-des-Prés (Les Hautes Alpes), a través de su vida, da cuenta desde comienzos del siglo pasado, de más de siete décadas de dicha historia, signada por los acontecimientos de entre las dos guerras mundiales.

Mario Wong. Escritor peruano. Vive en París desde 1989. Colaboró en la revista de poesía Maestra Vida (Lima-Perú) y en diferentes periódicos de la capital peruana. Actualmente es corresponsal de la revista latinoamericana Archipiélago (México) y Sieteculebras (Cuzco-Perú). Ha publicado artículos de crítica literaria en Librusa, Mula Verde Review, Letra 5, Mirada Malva, Ómnibus, Funes, Vericuetos, Ciberayllu, Casa Tomada, Dorada Apocalipsis, Sol Negro, Letralia. 


Entre sus publicaciones se encuentran: La estación putrefacta (Poesía, Maestra Vida, Lima, 1985), El testamento de la tormenta (Novela, Huerga & Fierro, Madrid, 1997), Moi, je vis à San Miguel, mais je meurs pour Amalia (Récits, édition bilingüe, Indigo, Paris, 2002), Cuentos Migratorios, 14 Escritores Latinoamericanos en París (Antología, Linajes, México, 2000), Le Paris latino-americain. Anthologie des écrivains latino-américains à Paris (Indigo, édition bilingue, préface de Claude Couffon, París, 2006), Su majestad el terror (Roman, Editorial Pasacalle, Lima, 2009), Lampadaires Bleus & autres textes (Poésie, bilingue, juillet 2014), Las brujas de Auschwitz (Mirada Malva, Granada, España, 2015)