José A. Velarde | Mario Wong

Ab-orígen(es), periplos en el lenguaje de los exilios varios, extraterritoriales y transculturales en la poesía ultima de José A. Velarde

Por Mario Wong


A N. D. (y à la “Dégueulasse”)

&, también, a J. Najar,

Con mi amistad siempre.  

 

In memoriam Julián Garavito, Luis Sepúlveda

& Pedro Novoa

 

   Ab-orígen(es) de la Amazonía, ab-orígen(es) del Altiplano, de Yunga-Uyo, de las “extra-territorialidades” y desterritorializaciones (espacio-temporales, lingüísticas, literarias…; ver ensayo de G. Stiner, “En extraterritorialité”; in: Extraterritorialité. Essais sur la littérature et la révolution du langage; Eds. Calman Lévy, 2002, pp. 19-29 ) el poeta José A. Velarde, en Ab-origen (1), libro de reciente publicación, rinde homenaje a Gamaliel Churata, el autor del Pez de oro: «No se es de donde se ha nacido,/ sino de donde se vino ;/ pues no siempre nace uno/ donde debiera » (Churata). El texto poético de Velarde tiene también, pienso, la validez de ser un «documento» etnográfico-poético, que surge de lo más profundo de lo «peruano»; y que me interpela (2), en tanto que el autor, si podemos decirlo, explora los lenguajes de la poesía (y otros como la música, íntimamente ligada) en sus periplos vitales, que corresponden a lo que los críticos de la obra literaria del escritor peruano José María Arguedas (para Mario Vargas Llosa “Arcaico”) denominan la transculturalidad (3). Las comunidades andinas, quechuas y, sobre todo, aymaras (que es la de la experiencia, por la parte materna, de la infancia del poeta), se expresan, en sus versos en español, en aspectos fundamentales en cuanto conciernen a los orígenes del ser, de las respectivas culturas; se instaura, pues, un diálogo con la tierra ancestral; cito:

«Hombres de barro/ que veneran la tierra,/ barro hechura de tierra,/ hombres sometidos a su abrigo, cielo azul, lago./ Puma/ de aguamarina transparencia » (poema XXVI).   

 

  En «Ayahuasca» -un poema, de fecha anterior, de otro de sus libros, Velarde escribe: «Con la soga voy a ver/ todo es visible alguna vez». Ab-origen, en los siete primeros poemas que corresponden a la Amazonía, trasmite las visiones del poeta; cito:

«El hombre sueña/ que penetra en el mundo sobrenatural, retorna al útero materno, / absorbido por el poder del rapé y del ayahuasca» (VI).

 

Y seguido, VII:

«Lujuria. / Magnífica fertilidad de la naturaleza./ Lianas serpentinas, gigantes,/ gomas, resinas, bálsamos, / todo no es más… ».

 

Y, una buena parte de «Puma» (III), texto totémico:

«La palabra cae como un meteorito/ bello y transparente, de diverso prisma/ multicolor. / El hombre identifica una parcela/ de su espíritu/ a las formas de un árbol,/ de un animal, una cueva,/ una montaña, o de un río.// (…) ».

 

Cito, in extenso, el poema XXVII:

«Lluvia de luceros líquidos, / como lágrimas precipitadas/ en abismales profundidades./ El pasaje del sol por el cenit./ Jailli solar del puma,/ celebración de los totorales,/ del canto sonoro del agua/ engastada de azulejos./ Carnaval de flores de Taquile./ Arde el aire dorado del sol,/ flamean sus brillantes crestas,/ enlazan/ Al Titikaka. ».

 

El erotismo está muy presente en esta cultura festiva altiplánica, en su culto operístico (popular), de sus danzas carnavalescas, «paganas» (4), en la Candicha, la virgen sirena «parrandera» (J. Najar); cito:

« Candicha, imilla del lago,/ virgencita jaranera,/ progenie de la tierra,/ rosal de flor encarnada/ en la memoria/ el rubor prende/ tus mejillas de khantuta,/ el brasero de tu corazón./ Tus suspiros aletean/ alegres en los totorales,// (…) » (XXXII).

 

Y, seguido, el poema XXVIII:

«A mi semilla imilla la deseo, me desea, / me posee, la poseo, / me muerde, jadea, / brinca, / beso sus mejillas de ayrampu, la abrazo, / me abraza, / la tomo de sus trenzas,/ del maíz de su cabellera,/ de su grácil  (…) ».

                                                                                                                     

   Finalmente, concluyo. La traducción de este hermoso libro bilingüe, en su musicalidad creativa, también en la otra lengua, cómplice, corresponde a la poeta francesa Nelly Détré; cito, poema XXXI:

« …/ Incendie dans le ventre de cristal,/ s’infiltrent des rayons de lumière,/ des diamants aiguisés éclaboussent l’air,/ inondent les totorales./ AB-ORIGEN/ES/ du lac.// (…) » (*).

 

(*) «…/Incendio en el vientre de cristal,/ se infiltran rayos de luz,/ aguzados diamantes salpican el aire,/ anegan los totorales/ AB-ORIGEN/ ES/ del lago.// (…) » (J.A. Velarde).

 


Notas :

(1) José Alberto Velarde, Ab-origen, bilingüe (español-francés); Trad. Nelly Détré, postface Jorge Najar ; Levée d’ancre, Eds. L’Harmattan, Condé-sur-Noireau, Juin 2022.

(2) Ver Iván Carrasco M., «Tensiones entre la intra y la interculturalidad en la poesía de E. Chihuailaf y L. Lienlaf»; «Una literatura del hibridaje», pp. 103-107; in : Orietta Geeregat Vera y Sonia Betancour Sánchez (Editoras), Interpelaciones (des)atadas. Elicura Chihuailaf y la palabra urgente. Contribuciones académicas, Eds. Univ. De la Frontera (Temuco), Santiago de Chile, septiembre, 2017. Sobre la hibridez cultural y la heterogeneidad textual en el poeta mapuche Elicura Chihuailaf, leer también de Juan Manuel Fierro B. «Recado confidencial a los chilenos: un proceso de transculturización y translocalización discursiva», Ibid. pp. 132-145.

(3)   Véase Antonio Cornejo Polar (Rev. Narración, Nueva Crónica y buen Gobierno y, también, el libro del estudioso francés, de la cultura andina, Roland Forgués).  

 (4) … ¿Híbridas?, ¿no?...; mejor, sincréticas. De “resistencia cultural” (política, todo es político y no necesitamos que…, como en los discursos “postmodernes”, porque…), en esta etapa de la mundialización capitalista neoliberal (freedmaniana), globalizada y tiránica (y terrorista en sus políticas económicas de choc), de la cual el novelista nobel M. V. Ll. es un sectateur (ideologique) forcené, después de varias décadas.