El Realismo Mágico latinoamericano El Realismo Mágico latinoamericano es unobjeto de discutida identidad. La expresión entró en boga en la década de 1960en las páginas culturales de la prensa latinoamericana, sin mucha reflexiónacerca de su espacio de referencia. El cubano Alejo Carpentier, con plenofundamento, ya había hablado de “lo real maravilloso” como materia de supropia, importante narrativa.
Hoy no son pocos quienes advierten acerca dela confusión posible entre el Realismo Mágico como estética literaria y elfenómeno comercial del boom de lanarrativa latinoamericana de mediados del siglo XX, donde no sólo apareció unaola de escritores nuevos o relativamente nuevos como podían ser el argentinoJulio Cortázar, sino que se redescubrieron otros de generaciones previas comolos mexicanos Juan Rulfo y Juan José Arreola, la chilena María Luisa Bombal, oel guatemalteco Miguel Ángel Asturias.
El boomy el auge del Realismo Mágico, como el descubrimiento de Gabriel García Marquez,se han atribuido recientemente, no sin cierto fundamento, a la inventivaempresaria de una agente literaria y editora catalana, Carmen Balcells.
Una síntesis de las característicasestético-literarias del Realismo Mágico latinoamericano y sus antecedentes,trazables a la década de 1920 o antes, se puede leer en http://es.wikipedia.org/wiki/Realismo_m%C3%A1gico.Un panorama de fuerte contenido testimonial sobre las estéticas literarias dela narrativa de fines del siglo XIX y comienzos del siglo XX se encuentra en PercyLubbock (1921) The craft of fiction(Londres: Jonathan Cape), reeditado repetidas veces hasta la actualidad.
Vocera extraordinaria de loscambios en la visión de la narrativa que en Europa anticiparon lo que sucederíaen América Latina ha sido la autora de novelas experimentales modernistas como Orlando (1928) y The Waves (1931), la inglesa Virginia Woolf, en la antología de estudiossuyos sobre literatura narrativa La torre inclinada y otros ensayos (Barcelona:Lumen: 1977). |